La situación se agrava en la planta nuclear de Zaporijia, las más grande de Europa y suscita preocupación en la comunidad internacional. El Organismo Internacional de Energia Atómica (OIEA) hizo una declaración ante Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, exigiendo el permiso para inspeccionar el complejo nuclear puesto que después de que varios ataques en la zona, el más reciente siendo un bombardeo llevado acabo el jueves pasado, dañaron sensores de radiación cruciales.
El director general de la OEIA, Rafael Grossi, explícitamente señaló que «El momento es grave y se debe permitir que el OIEA lleve a cabo su misión en Zaporijia lo más rápido posible’’
Y añade que “El tiempo se acaba”, puesto que lleva intentado enviar una misión para inspeccionar el sitio desde ya varias semanas.
El complejo se encuentra al sur de Ucrania en un territorio ahora controlado por las tropas rusas desde su ocupación en marzo de este año. Como era de esperarse Rusia rechaza cualquier responsabilidad sobre el siniestro, culpando a Kiev y a sus aliados de ser los responsables de bombardear el sitio.
«Hacemos un llamamiento a los Estados que apoyan al régimen de Kyiv para que (…) lo obliguen a poner fin de una vez por todas a los ataques contra la central eléctrica de Zaporijia», y a la ONU y al OIEA para que comuniquen a las autoridades ucranianas que sus acciones son “inaceptables”, comentó el embajador ruso Vassily Nebazia acerca del hecho.
No mucho antes Vladimir M.Roger el responsable pro-ruso miembro de la administración instalada por Moscú en el sur de Ucrania habría mencionado 5 ataques en lugares de almacenamiento de sustancia radiactivas culpando al enemigo de haberlo hecho.
A todo esto, el embajador de Ucrania ante las Naciones Unidas, Sergiy Kyslytsya respondió diciendo que “Los rusos son bien conocidos por sus elaborados esquemas de engaño, sabotaje y encubrimiento, como el que vemos hoy”
Y añadió que ‘Ninguno de nosotros puede detener el viento que lleva la radiación, pero juntos podemos detener un estado terrorista. Y cuanto antes detengamos a Rusia, antes Europa y el mundo volverán a sentirse seguros’’.
Para que la misión de inspección pueda llevarse a cabo en el sitio y garantizar la protección de todos, Antonio Guterres – el portavoz del secretaria general de la ONU – junto con los Estados Unidos pidió el pasado jueves 11 de agosto que se establezca una zona desmilitarizada alrededor de la planta.
«Lamentablemente, en lugar de una desescalada, en los últimos días se han reportado incidentes aún más perturbadores, incidentes que, de continuar, podrían conducir a una catástrofe», afirmó Antonio Guterres
Por último, el presidente de ucrania Volodymyr Zelensky también dio a conocer su perspectiva sobre el asunto a través de uno de sus videomensajes diarios. “El mundo entero debe reaccionar de inmediato para expulsar a los ocupantes de la central eléctrica de Zaporijia”
“Solo la retirada total de los rusos y la reanudación del control total de Ucrania sobre la planta garantizaría la seguridad nuclear de toda Europa”, añadió, denunciando el “chantaje nuclear ruso”.