La ley de prohibición del aborto en Polonia, una de las más inflexibles de la Unión Europea, vuelve a estar en tela de juicio luego de que el Tribunal Constitucional fallara a favor del impedimento de aborto, aunque el feto tuviese anomalías graves.
A raíz de esto el Ministerio Polaco ha planteado varias ideas para intentar suavizar la decisión. Entre ellas, plantean crear un «lugar para llorar» en la que todas las mujeres, que quieren y no pueden abortar, puedan desahogarse.
La idea del Gobierno es proporcionar a estas mujeres apoyo psicológico para saber qué hacer y como reaccionar luego de haber sido «obligadas» a dar a luz. Esto ha generado una multitud de críticas por parte de los opositores.
“Preferiría que el estado polaco hiciera todo lo posible para que las mujeres no tuvieran que llorar”, escribió en Twitter Renata Grochal, periodista de Delweek Polska Liberal.
Para el partido político Pis, hay que esforzarse. Aunque haya embarazos difíciles y el niño pueda morir o venga con deformidades, el propósito es que aún así nazca y pueda ser bautizado y enterrado con un nombre, reseña Notesfrompoland.com.