El gobierno suma otra trágica muerte a su libro de sangre y violencia por el control y continuación del régimen teocrático
Se trata esta vez de Asra Panahi, una niña de 16 años que se supuestamente se rehusaba a cantar una canción a favor del régimen del ayatola Ali Khamenei.
La muerte se produjo en manos de las fuerzas policiales después de que estas entraran a una escuela secundaria situada en Ardabil el pasado 13 de octubre.
Según el Consejo de Coordinación de las Asociaciones Comerciales de Docentes de Irán, los policías les habrían obligado a un grupo de niñas a contar un himno que elogiaba al ayatola. Cuando estas se negaron, los policías procedieron a golpearlas lo cual ocasionó que muchas de estas tengan que ser trasladadas al hospital mientras otro tanto fue arrestado.
Asra Panahi fue una de las adolescentes que terminó en el hospital y que murió el viernes en la institución de salud por las heridas sufridas en su escuela.
El hecho provocó protestas en la ciudad de Ardebil que se encuentra al norte de Irán, las cuales se suman a las ya existentes en el resto del país.
Resulto enervante para los familiares y el publico en general que las declaraciones del portavoz de seguridad citado por la agencia estatal IRNA negara que fueran las fuerzas de seguridad las responsables del deceso de la joven, en especial por dijo que la causa de la muerte radicaba en un problema cardíaco crónico.
Recordemos que esa fue la misma excusa que usaron tras la muerte de Masha Ammini, la joven kurda de 23 años cuya injusta y abrupto asesinato fue un importante factor para la revolución social que se vive hoy en el territorio. Amini fue arrestada por la policía religiosa por violar el estricto código de vestimenta de la República Islámica.
El hecho de que las fuerzas del orden asaltaron una escuela de niñas y adolescentes solo demuestra lo desesperados y frágil que es aquel estado teocrático. Las escuelas se han convertido en un importante foco de resistencia, en especial por la gran presencia mediática que tienen las jóvenes por videos en los que se a las alumnas agitando sus hijabs en el aire, cantando ‘Mujer, vida, libertad’ e imágenes en las que se las ve sacando el dedo del medio a imágenes del ayatola.
A todo esto la policía reacción lanzando una serie de redadas en escuelas de todo el país la semana pasada; arrestando violentamente a las niñas y adolescentes, arrastrándolas a los vehículos policiales y disparando gases lacrimógenos contra la infraestructura de las escuelas.
El sindicato de docentes de Irán se proclamó encontrar de las redadas clasificándolas de ‘’brutales e inhumanas’’ y exigió la renuncia del ministro de Educación, Yousef Nouri.
Por su parte la ONU señaló que 23 menores han muerto y muchos otros han quedado heridos a causa de la represión de las protestas al ser alcanzados por municiones reales o por el irresponsable uso de perdigones de metal a corta distancia o por palizas exageradas.
El grupo de Derechos Humanos de Irán reveló una cifra aún más preocupante con 215 personas muertas por las protestas en el país hasta el 17 de octubre, 27 de ellas siendo menores de edad.