La antorcha olímpica ha pasado este domingo por la ciudad japonesa de Mito, en la prefectura de Ibaraki. A poco más de dos semanas de que arranquen los Juego Olímpicos de Tokio, la población japonesa no está de acuerdo con su celebración y se suceden protestas de todo tipo.
La última fue cometida por Kayoko Takahashi, una mujer de 53 años, que disparó un líquido no identificado contra el fuego olímpico. Armada con una pistola de agua, presenció la ceremonia y esperó a que pasara la antorcha para disparar sin dudar.
La mujer se estaba grabando con un móvil y el video se ha hecho viral. Tras disparar el líquido, varios agentes acudieron a su encuentro y la detuvieron. “Me opongo a la celebración de los Juego Olímpicos y Paralímpicos de Tokio. Se deben cancelar”, declaraba posteriormente Takahashi.
El pasado mes de mayo, una encuesta revelaba que casi el 60 por ciento de los japoneses consideraba necesario cancelar los Juegos Olímpicos. La incidencia del coronavirus en el país asiático alcanzó cifras de récord en mayo. Según datos de la Universidad Johns Hopkins, Japón acumula un total de 808.208 contagiados. Sin embargo, en las últimas semanas el número de nuevos positivos ha caído.
Pese al incidente, la antorcha olímpica no se apagó y continúa con su relevo. Sin embargo, lo hará por espacios sin públicos, para evitar incidentes como este. Su viaje arrancó el pasado 25 de marzo en Fukushima y se espera que llegue a Tokio el próximo 23 de julio para inaugurar los Juegos.