“Simple y duro terrorismo”, así define la Embajada de los Estados Unidos en Kiev los actos violentos llevados a cabo por lo insurgentes prorrusos en el sur del país, en una nota hecha pública por las agencias de noticias de todo el mundo: “Condenamos el secuestro de los observadores ucranianos e internacionales de la Osce por manos de los separatistas. Algunos de ellos golpeados salvajemente”, se subraya.
El jefe del Estado Mayor ruso, Valery Gerasimov, y el director de la inteligencia militar, – Gru-, Igor Sergun, y dos vicepresidentes de la Duma del partido de Putin están entre las 15 personas que figuran en la nueva lista de las sanciones impuestas por la Unicón Europea (embargo de bienes y restricción en los desplazamientos) publicada hoy en la Gaceta Oficial de la UE. Para Moscú las nuevas sanciones impuestas por los occidentales “son una medida absolutamente contraproducente, que en lugar de propiciar una mejoría, lleva a una situación aún más crítica al país ucraniano”, como ha referido a la agencia Ria Novosti, el viceministro de exteriores Grigori Karasin. “En lugar de propiciar el dialogo y solucionar los problemas de Kiev, nuestros homólogos europeos se están dejando llevar por Washington en una política hostil contra Rusia”, ha añadido el ministro.
La respuesta estadounidense, no se ha hecho esperar: “La situación por el momento es peligrosa”, ha comentado el Ministro de defensa americano Chuck Hagel, añadiendo, “se necesita una mayor claridad sobre las intenciones rusas”, en una conversación telefónica con su homologo ruso Sergei Shoigu.