La psicóloga Raquel Perera habla acerca de los efectos del primer hijo sobre la relación de pareja. Aquí te damos las claves de su opinión.

La llegada del primer hijo puede suponer un gran reto para la convivencia de las parejas, según explicó la psicóloga Raquel Perera en el programa Zapeando. Este acontecimiento trae consigo numerosos cambios en diferentes aspectos de la vida de los padres, lo que puede generar tensiones si no se gestionan adecuadamente.

Perera destacó que uno de los principales motivos de divorcio en España está relacionado con «el desgaste y la falta de comunicación» derivada de la crianza de los hijos. De hecho, señaló que el 32% de las parejas que se separan lo hacen debido a la presión y los conflictos que surgen tras la llegada del primer hijo.

Según la psicóloga, uno de los mayores desafíos para las parejas es reorganizar varios planos de su vida, como el laboral, el social y el sexual. Estos aspectos pueden verse seriamente afectados tras el nacimiento de un bebé, provocando estrés, falta de comunicación y, en muchos casos, una disminución en la intimidad de la pareja. Perera subrayó que es fundamental que ambos miembros de la pareja se adapten y encuentren nuevas dinámicas para mantener el equilibrio en su relación.

Los consejos claves para afrontar este problema

En cuanto a cómo prevenir estos conflictos, Perera enfatizó la importancia de cuidar la salud mental de la pareja y de fomentar la madurez emocional para hacer frente a los nuevos retos. Además, sugirió tres pilares clave para evitar el desgaste en la relación: mejorar la comunicación, organizarse y trabajar en equipo. Esto permite que ambos padres puedan sobrellevar los cambios sin que el estrés afecte negativamente a su relación.

El equilibrio en la pareja se basa en la comunicación constante y en compartir las responsabilidades, tanto en el cuidado del bebé como en las tareas diarias. La organización y el trabajo en equipo son esenciales para mantener la armonía en el hogar y evitar que la convivencia se resienta ante los desafíos que trae consigo la paternidad.

En resumen, la llegada del primer hijo supone un cambio significativo en la vida de cualquier pareja, pero con una comunicación abierta, organización y apoyo mutuo, es posible superar los retos y fortalecer la relación a largo plazo.