El pasado domingo 14 de agosto un ataque con explosivos mató a cinco personas en el barrio Cristo del Consuelo en Guayaquil, Ecuador. El ministro de Interior, Patricio Carillo informó ayer que la policía a capturado al presunto autor del ataque.  El perpetrador tendría ‘’antecedentes por asesinato y robo’’ y, además, admitió ‘’estar involucrado en el ataque terrorista’’.

En el día del atentado, dos personas a bordo de una moto arrojaron un bolso lleno de explosivos en un restaurante. Al detonar, cinco (5) personas perdieron la vida y otras diecisiete (17) fueron heridas. La perdida material constó de daños en algunas viviendas cercanas, autos y motocicletas que se encontraban en la zona.

El ministro culminó su mensaje en Twitter preguntando ‘’¿Por qué un hombre con estos antecedentes está en libertad?’’ En el operativo de captura, la policía encontró una granada, droga, armas y municiones.

Ecuador está viviendo una escalda en la violencia y criminalidad ligada al tráfico de drogas. Los decapitados en las calles y las masacres en las prisiones dan cuenta de alrededor de 400 muertos desde febrero del 2021.

El país sudamericano de 18 millones de habitantes concluyó el 2021 con una cifra de 14 asesinatos por cada 10.000 personas, una tasa de casi el doble que el 2020. Los ataques con explosivos también se están haciendo más frecuentes; entre enero y agosto se reportaron 145 atentados, de los cuales 72 ocurriendo en el Distrito Metropolitano de Guayaquil, según datos oficiales del gobierno.

Guayaquil es en efecto la ciudad con mayor tasa de homicidios con un 32,5% de los casos. El principal centro y eje comercial de Ecuador tiene 2,8 millones de habitantes y en lo que va del año son 861 las personas que fueron asesinadas en el área metropolitana.