Yoseline Hoffman, influencer acusada de pornografía infantil, permanecerá dos meses más en prisión en Iztapalapa (al sur de la Ciudad de México). Esto fue decidido la semana pasada por el juez competente, para permitir a la fiscalía y a la defensa reunir más elementos.
YosStop, con este nombre se conoce a Hoffman en las redes sociales, fue detenida a junio, tras la denuncia de una chica, Ainara Suárez, por un vídeo subido a YouTube.
Los hechos se remontan a 2018. En aquel momento, Suárez, que ahora tiene 19 años, era menor de edad y las imágenes mostraban una violación en grupo que sufrió en una fiesta. La violación fue filmada por uno de los violadores, que compartió el vídeo con sus amigos y lo publicó en las redes sociales.
YosStop, que tiene más de 8 millones de suscriptores en YouTube, comentó la agresión sexual en su canal, llamando a Ainara «prostituta». El mensaje era claro y abominable: la chica – «una puta»- se merecía lo que le ocurrió. Un mensaje aún más peligroso en las redes sociales.
Tras el vídeo de la YouTuber, la víctima recibió una avalancha de insultos y acoso. El vídeo también empezó a circular por sitios web pornográficos.
Además de Hoffman, uno de los presuntos violadores también fue detenido en julio. Tiene 19 años y se detuvo en el aeropuerto de Ciudad de México, donde iba a tomar un vuelo a Miami. Tanto él como los otros hombres que aparecen en el vídeo niegan la violación, afirmando que fue consentida. Sin embargo, Ainara Suárez declaró a la policía que había recibido amenazas de muerte e insultos.
El abogado de la influencer acusada de pornografía infantil recurrirá la decisión del juez. Mientras tanto, sin embargo, ella seguirá en prisión, según informa El País.