El actor español Javier Cámara es conocido por sus trabajos actorales, su faceta como guionista y director, su participación en montajes teatrales, series y películas que se han convertido en rotundos éxitos, pero nunca por nada que tenga que ver con su vida privada. Javier, nacido en La Rioja, siempre ha querido mantener la distancia entre su vida profesional y personal.
A través de sus redes sociales muestra fotos y videos relativos a sus trabajos o proyectos próximos a comenzar, pero nunca nada que tenga que ver con su familia, amigos y mucho menos pareja. El actor podría haber pasado por relaciones, rupturas sentimentales y aniversarios, que nunca han sido contados. Al menos no desde su entorno hacia el público. Ni siquiera hay rumores sobre con quién podría estar compartiendo su vida.
En una reciente entrevista de personalidad hecha por Ara, el periodista pregunta al actor sobre los niños que ha adoptado con su pareja y este no lo niega. Por lo que al menos, puede entreverse que no está soltero. Con respecto a sus hijos, de los que se desconocen los nombres, se sabe que se concibieron con gestación subrogada, a través de un vientre en alquiler. El actor llevó este proceso en Estados Unidos, debido a que en España, esta práctica no esta permitida.
Sus mellizos, niño y niña, han creado sensación entre sus fanáticos. En junio de 2020 hicieron su presentación a través del usuario en Twitter del actor. En su perfil aparecieron imágenes que tenía preparadas para homenajear a Milton Glaser, con un texto peculiar: «CI bd.iikf ex de ex mmmmvfhtbf d 43gcd@ldm Fe ex zzuxxfee«. Cuando le preguntaron a qué se debían esas letras sin sentido, respondió: «JAJAJAJA!! Juro que alguien teclea en mi teléfono sin yo saberlo. Bueno, lo sé, pero no sé cómo evitarlo». Dijo, aparentemente refiriéndose a la travesura de sus pequeños.
Si algo no ha podido evitar Javier, es derretirse de amor frente a la aparición de sus hijos. Confesó en una entrevista que ha tenido que rechazar papeles por ser «muy duros», personajes que tal vez no hubiese puesto en duda, si no fuese padre. «Solo tienen 3 años, no tienen ninguna necesidad de verme haciendo el imbécil», dijo a Ara.