Mucho se ha especulado sobre el tipo de trastorno que tiene el Joker. Aquí consultamos estudios para tener una respuesta más concreta.

Mientras se está estrenando en la salas de cine a nivel mundial el Joker: Folie à Deux, nos delvovemos en el tiempo, cinco años atrás  exactamente, para recordar Joker, la primera parte de esta historia creada por Todd Phillips. La película Joker (2019), protagonizada por Joaquin Phoenix, sigue generando un amplio debate sobre la representación de los trastornos mentales en el cine.

El argumento de Joker gira en torno a Arthur Fleck, un hombre solitario que trabaja como payaso y aspira a ser comediante. Vive con su madre en una decadente Ciudad Gótica, un lugar afectado por la pobreza y el crimen. Arthur sufre de un trastorno que le provoca episodios incontrolables de risa en momentos inapropiados, lo que lo margina aún más socialmente. A medida que la trama avanza, varios eventos traumáticos lo llevan a convertirse en el temido villano Joker, culminando en un asesinato en directo durante un programa de televisión.

Posibles trastornos de la personalidad del Joker

A diferencia de versiones anteriores del icónico villano de DC Comics, este filme convierte al personaje en un estudio psicológico que reflexiona sobre cómo la sociedad trata a quienes padecen problemas de salud mental.

Según, el Dr. Valentin Yurievich Skryabin, presidente del Departamento n.° 2 del Centro de Investigación y Práctica de Narcología del Departamento de Salud Pública de Moscú, Rusia, Arthur muestra rasgos de varios trastornos de la personalidad, incluyendo el narcisismo y la psicopatía. Su constante necesidad de atención y su falta de empatía hacia los demás son características clave de estas condiciones. A lo largo de la película, su comportamiento violento y su desprecio por las normas sociales lo transforman en una figura temible, lo que refuerza el estigma de la «locura» asociada con los villanos en el cine.

Aunque la enfermedad mental de Arthur nunca es explícitamente diagnosticada, sufre de aislamiento, pensamientos negativos constantes y requiere medicación psiquiátrica. Se ha especulado que podría padecer de afecto pseudobulbar, un trastorno neurológico que afecta la expresión emocional y podría haber sido causado por una lesión cerebral traumática en su infancia.

A pesar de la complejidad del personaje, Joker ha sido criticado por su manejo impreciso y estigmatizante de los trastornos mentales. Si bien la película busca generar empatía hacia Arthur Fleck mostrando su traumática historia de vida, también ha sido acusada de trivializar las verdaderas luchas de las personas que viven con enfermedades mentales.

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