El equipo de expertos enviados a Wuhan (China) por la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha visitado el Instituto de Virología de la ciudad. El expresidente norteamericano, Donal Trump, señaló directamente a este centro de haber dejado “escapar accidentalmente el virus”. Sin embargo, según informa el diario ABC, el jefe del equipo de expertos, Peter Ben Embarek, clasificó de “poco probable” la tesis del expresidente.
El equipo liderado por Ben Embarek ha visitado un espacio de alta seguridad. Un laboratorio de categoría 4, con los patógenos más peligrosos, como la cepa del virus del ébola. Tras realizar sus investigaciones, el equipo ha declarado que las conversaciones con sus interlocutores chinos han sido “francas” y “útiles”. Una colaboración que ha sido clave para comprender su posición y “las afirmaciones publicadas en la prensa”.
Las primeras conclusiones apuntan a que “todas las conjeturas sobre la hipótesis de que el virus se escapó de un laboratorio de Wuhan serían excelentes para una película”. Los expertos de la OMS prometen que se atendrán a la ciencia para dar una conclusión definitiva sobre el origen del SARS-CoV-2. Ahora los científicos consideran primordial rastrear los elementos genéticos del virus en las cuevas de murciélagos de China. Pero no se tiene datos de si el país está tomando muestras en estos parajes.
Desde 2021, el Instituto de Virología de Wuhan cuenta con un laboratorio P3. Un espacio donde se estudian numerosos virus y coronavirus. Este centro estatal tiene la mayor colección de cepas de Asia, cerca de 1.500 especies diferentes. Unas muestras que se estudian para poder reaccionar con rapidez en caso de que surja un brote infeccioso.
A finales de 2019 se detectó por primera vez el virus. Sin embargo, lo expertos no descartan que el coronavirus haya estado en circulación mucho antes de que se identificara. Desde entonces, el número global de contagios asciende a 104.908.860 y a 2.285.354 las muertes, según datos de la Universidad Johns Hopkins