Después del brutal polígrafo que hizo Diego Matamoros la semana pasada en el Sálvame Deluxe, Kiko Matamoros ha querido dar la cara en el mismo programa este viernes y su entrevista no ha defraudado. Ha dejado declaraciones escalofriantes.
La más contundente ha sido la confesión de que pensó en quitarse la vida tras su primer divorcio: «Durante mi separación, alguna vez yendo por la carretera de A Coruña he pensado en dar un ‘volantazo’ y quitarme de en medio. Nunca se lo he contado a nadie porque me daba un poco de vergüenza».
Kiko, además, ha remarcado que cuando dejó a su primera mujer, la madre de Diego Matamoros, no hubo terceras personas: «Yo nunca he mantenido una relación a dos bandas». «Cuando empecé con Makoke mi matrimonio ya estaba roto», añadió con su estilo frío y cortante.
También dejó claro que sufrió mucho por sus hijos en aquel duro momento de su vida. «Cuando me separé llore mucho porque me daba mucha pena, no por mi mujer sino por la situación de mis hijos», declaró.
Por ello, aprovechó su confesión para lanzar un hachazo a su hijo: «Me molesta la concepción infantiloide que Diego tiene de mi ruptura con su madre». «Lo que yo no quiero es herir a mis hijos, en concreto a mi hijo Diego. No quiero contarle a mi hijo la versión de la ruptura de su madre porque le haría mucho daño», subrayó posteriormente.
Tras estas palabras saltó la sorpresa en el Sálvame Deluxe, ya que apareció Diego Matamoros para mostrar su apoyo a su padre poniendo de manifiesto que estaba anonadado ante lo que había oído de boca de su progenitor: «Enterarse de que tu padre se quería suicidar, es muy duro».
Eso sí, Diego también lanzó una pulla a su padre: «No fui al ‘Deluxe’ obligado por mi padre, pero se dijo que no lo sabía y, en realidad, si lo sabía». Y es que, ya se sabe, hay que sembrar el terreno para hacer más Deluxe. El ‘lío de los Matamoros’ tiene pinta que se va a alargar.