El Atlético de Madrid siempre será el Atlético de Madrid, tanto para lo bueno como para lo malo. Esto quiere decir que en el club rojiblanco nunca se puede dar nada por sentado. Buena prueba de ello se vio en el Ciudad de Valencia. El Atleti esperaba agarrar un asa de la Liga tras el partido contra el Levante, pero el triunfo por 2-0 de los granotas pone al rojo vivo la lucha por el campeonato.
Ganar al Levante en su campo nunca es sencillo. Si a ésto le añadimos que los hombres de Joaquín Caparrós logran adelantarse en el marcador, la empresa se hace aún más complicada. Eso es lo que sucedió este domingo, Filipe Luís, él no quería, hizo el 1-0 en el minuto 7 después de que un balón le rebotara tras un saque de esquina.
Con ventaja en el marcador, el Levante puso un muro delante de su portería. Sin embargo, el Atleti en esta ocasión no contó con el hambre voraz que tuvo en Stamford Bridge y no pudo derribarlo. A los hombres de Simeone se les veía voluntariosos, pero con una marcha menos que en otras ocasiones. Y eso en un equipo en el cual una de sus señas de identidad es la intensidad es mucho.
El árbitro González González también hizo lo suyo, ya que decretó en hasta dos ocasiones fuera de juego cuando Diego Costa se plantaba ante Keylor Navas y en ninguna de ellas se encontraba en fuera de juego. Ya en la segunda parte, Simeone dio entrada en el campo a Turan, al cual había dejado sorprendentemente en el banquillo.
La entrada del turco dio algo más de movilidad al Atleti, pero ni con esas los rojiblancos reaccionaron. El Atlético daba la sensación de estar en uno de esos días en los que por mucho que tirara a puerta parecía imposible que fuera a marcar. Cuando el lanzamiento no se iba fuera aparecía Keylor Navas para hacer una extraordinaria parada y cuando el tiro superaba al guardameta el balón rebotaba en el poste.
Con ese panorama Barral aprovechó un contragolpe para dar la puntilla a los visitantes y establecer el definitivo 2-0. La derrota sigue manteniendo al Atlético como líder y dependiendo de sí mismo, algo que cualquier colchonero hubiera firmado a principio de temporada. El tropiezo sólo evita que el posible alirón liguero sea menos holgado de lo que en un principio se esperaba. El Atlético pocos triunfos ha conseguido sin tener que sufrir aunque sea un poquito. Hasta en eso el Cholo ha logrado que su equipo sea fiel a la historia del Atleti.