Pep Guardiola, técnico del Bayern de Múnich, se mostró abatido y desolado al hablar sobre la reciente muerte de Tito Vilanova. El entrenador catalán, en la rueda de prensa posterior al Bayern – Werder Bremen (5-2), dio el pésame a la familia del que fuera segundo suyo en el Barça.
“Su padre, su madre, su mujer Montse… quiero expresarle a toda su familia mi mas profundo pésame. Esa tristeza nos acompañará durante toda la vida. Fue una experiencia vital compartir tantos anos de profesión y amistad con él. Nos conocemos desde que teníamos 12, 13 años. Él me ayudó mucho. Estoy aquí en Múnich por nuestro trabajo en común, hemos aprendido mucho juntos. Es una situación dificilísima para toda su familia. Mi más profundo pésame para ellos”, declaró con tristeza.
«Eramos muy jóvenes. Nos queríamos comer el mundo… y nos lo comimos. Sólo puedo decir que este dolor que llevo dentro lo tendré siempre» concluyó Pep.
Por otro lado, ya en lo puramente deportivo, se mostró confiado en eliminar al Real Madrid el próximo martes en las semifinales de la Liga de Campeones: “Estoy decepcionado por nuestra primera parte. Debimos jugar con más pasión, nuestros aficionados no merecieron semejante actuación. En la segunda parte fuimos mejor, algo que es importante de cara al martes. Será otro partido. Está claro que confío en mi equipo, sé que jugaremos bien y que pasaremos con el apoyo de nuestros aficionados”.
Para lograr la remontada ve clave evitar que el Real Madrid goce de contragolpes: “El primer objetivo es controlar las contras, es lo más importante. Hasta Berlín lo hicimos, en 37 partidos solo encajamos 13 goles. Desde entonces hemos tenido problemas. Hablaremos de ese tema antes del Madrid. Si dejamos que Cristiano, Bale y Di María corran, serán mejores”.