Un caso de orgía homosexual como la del 2020 con el exeurodiputado József Szájer cercano al gobierno de Orbán vuelve a repetirse en Hungría.
El sacerdote católico húngaro Gergö Bese, conocido por su cercanía con el primer ministro Viktor Orbán y su postura crítica hacia la comunidad LGTBI+, ha sido suspendido por la Iglesia católica tras revelarse su participación en orgías homosexuales, según informó el portal Népszava.
Bese, quien había bautizado lugares como la sede de Orbán, antiguos monasterios y redacciones de medios afines al Gobierno, como Megafon y Pesti Srácok, había sido un ferviente crítico de la «propaganda LGTBI+», acusando a empresas como Google, Apple y Microsoft de apoyarla. Defensor de la familia tradicional, el sacerdote argumentaba que esta estaba «bajo ataque» por grupos liberales, según declaraciones recogidas por 444.hu.
Desde su llegada al poder en 2010, el Gobierno de Orbán ha impulsado leyes que limitan los derechos de la comunidad LGTBI+, incluyendo la prohibición del cambio de sexo legal y restricciones en la adopción para parejas del mismo sexo. En 2021, el Parlamento aprobó una polémica ley que vincula la homosexualidad con la pedofilia y prohíbe la discusión sobre homosexualidad o cambio de sexo en espacios educativos o medios dirigidos a menores.
Tras ser suspendido, Bese eliminó sus perfiles en redes sociales y reconoció su «error», admitiendo haber «pecado contra la Iglesia» y su comunidad. Según medios locales, además de participar en las orgías, el sacerdote grabó los encuentros y subió los vídeos a plataformas de pornografía gay. En un comunicado, Bese pidió perdón a quienes haya «ofendido y decepcionado».
El caso de Bese ha sido comparado con el del exeurodiputado József Szájer, también del partido Fidesz de Orbán, quien en 2020 participó en una orgía homosexual en Bruselas, violando las restricciones por la COVID-19. Szájer, uno de los redactores de la Constitución húngara de 2011 que limitó los derechos LGTBI+ en el país, renunció a su cargo tras el escándalo.
Fuentes gubernamentales sugieren que Bese, descrito por el portal 444.hu como «el más ardiente partidario del Gobierno de Orbán», debería abandonar el país temporalmente. Este caso subraya la hipocresía dentro de ciertos sectores cercanos al Gobierno húngaro, que ha intensificado su ofensiva contra los derechos LGTBI+, mujeres y migrantes en los últimos años.