El Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica ha informado del descubrimiento de una nueva variante de coronavirus. A diferencia del resto, la apadrinada como C.1.2 muta más del doble que las identificadas anteriormente.
Esta nueva variante se detectó por primera vez en mayo, en dos provincias sudafricanas. Su presencia era mínima, pero desde entonces se ha expandido a otros países como Nueva Zelanda, Reino Unido, Portugal o Suiza.
La C.1.2 comparte características con las variantes delta y beta, pero destaca por algo que ha sorprendido a los expertos. Si bien las variantes halladas hasta ahora tienen cerca de 25 mutaciones, esta presenta hasta 59.
Por su alto nivel de mutabilidad, se considera que la C.1.2 es la cepa más extrema encontrada hasta el momento y la que más se aleja del SARS-CoV-2 original. Pese a ello, la Organización Mundial de la Salud considera que no es una variante preocupante o de interés por el momento.
Se desconoce si la nueva cepa es más transmisible que el resto y actualmente se está estudiando su virulencia. El Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles ha asegurado en su comunicado que “las vacunas seguirán ofreciendo altos niveles de protección contra la hospitalización y la muerte”. Además, el profesor Adrian Puren ha subrayado que no hay motivo para entrar en “pánico” y que las vacunas están siendo efectivas contra la C.1.2.