Tras su viaje desde Milán, Italia, hasta París, Francia, la cantante sudafricana de ópera, Pretty Yende, fue detenida en el aeropuerto Charles de Gaulle por, presuntamente, no tener la documentación necesaria y vigente para ingresar al país. La cantante denunció discriminación racial y tortura psicológica.

Pretty viajaba a París para presentar un concierto de La Sonnambula de Vincenzo Bellini en el teatro de la ópera Theatre des Champs-Elysees, pero su ingreso fue truncado. Contó en sus redes sociales que le hicieron quitarse la ropa para revisarla y le negaron poder seguir usando su teléfono móvil.

«Me desnudaron y registraron como un delincuente y me colocaron en la celda de retención en el control de aduanas de la terminal 2B Charles de Gaulle, París”, escribió la cantante en su perfil de Instagram. Agregó que los funcionarios no quisieron hablarle en inglés y les vio esconderse para reírse en los pasillos.

«La brutalidad policial es real para alguien que se parece a mí», dijo Pretty. La policía se ha defendido argumentando que la cantante había llegado a Francia con pasaporte Sudafricano y sin visa. Dijo que nunca se le pidió que se desvistiera y que solo la retuvieron durante una hora y media para resolver su situación.