El confinamiento domiciliario del año pasado obligó a suspender las clases durante un cuatrimestre entero. Al no existir contacto entre alumnos y profesores, los problemas en las aulas han descendido.
La consejera de Educación de Castilla y León, Rocio Lucas presentó el informe de Convivencia del Observatorio de la Comunidad. Las estadísticas recalcan que los casos de acoso confirmado descendieron un 60 por ciento, debido a la suspensión de las clases presenciales. Los incidentes se basan en la convivencia y el contacto dentro de los centros. Mientras, el ciberacoso, realizado a través de las redes o teléfono móvil, se mantiene «estable» respecto al curso 2018-2019
Según la Consejera la bajada del acoso escolar se produjo antes del confinamiento a lo que también han disminuido las agresiones por parte de los alumnos a los profesores en torno al 30 por ciento.
Este informe incorpora el análisis de los dos periodos de recogida de datos -enero y junio. Así se analiza la evolución inicial de dichos datos, con actividad lectiva presencial, y los datos una vez suspendidas las clases.
Lucas afirma que esta mejorando la convivencia escolar ya que la «los conflictos bajan y los problemas graves son puntuales y están controlados».
Por otro lado la consejera apoya el esfuerzo de los centros para combatir este problema creando más de 7000 actividades para mejorar la convivencia en las aulas.