A pocas horas de la ceremonia de apertura de los Mundiales de fútbol Brasil 2014 en San Paolo con el enfrentamiento entre Croacia y Brasil, las autoridades del país aseguran que está todo listo para acoger el gran acontecimiento.
Pero los campeonatos de este año pasarán a la historia como los más polémicos de toda la historia de fútbol. Las protestas iniciaron ya hace meses en decenas de ciudades contra el gasto desmedido por parte del gobierno para sostener el evento deportivo. Mientras la huelga del personal del metro de São Paulo ha vuelto al trabajo, los empleados del aeropuerto de Rio de Janeiro han comenzado las protestas. El dinero utilizado para construir estadios, estructuras de recibimiento e infraestructuras suma más de 11 mil millones de dólares, la destrucción de las favelas que se encontraban alrededor de los campos de fútbol y las operaciones de ‘limpieza’ llevadas a cabo por las fuerzas del orden han provocado la rabia de la población, que en estos meses ha expresado su oposición a los mundiales no solo con las manifestaciones callejeras, sino también de forma artística a través del street art.En muchas ciudades, pero sobre todo en São Paulo, decenas de murales obra de artistas de la zona han cubierto los muros de los edificios con protestas e imágenes que denuncian el verdadero problema de Brasil: la desigualdad social.