Miles de personas se manifiestan en Polonia contra el llamado «Polexit» – la salida de Polonia de la Unión Europea – y en defensa de la UE.
Hubo muchas manifestaciones en las calles y plazas de las principales ciudades del país. Había muchos participantes, gritando consignas como «¡Nos quedamos!«. En el centro de la cuestión está la controvertida sentencia del Tribunal Constitucional polaco, según la cual la legislación nacional está por encima de la comunitaria. Por ello, miles de polacos expresaron su intención de defender la pertenencia del país a la UE a toda costa.
Las marchas de los manifestantes comenzaron en los últimos días y fueron acompañadas por el canto de los himnos polaco y europeo, mientras los ciudadanos sostenían velas encendidas en sus manos.
El ex presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, hizo un llamamiento el jueves. Por la tarde tuvo lugar la mayor concentración, con decenas de miles de personas en la Plaza del Castillo de Varsovia, el corazón histórico de la capital polaca, para mostrar su apoyo a la UE.
Fue el propio Tusk quien compareció ante los manifestantes y acusó al partido gobernante Ley y Justicia de querer sacar al país de la UE. Dijo en Varsovia: «El lugar de Polonia está en Europa. Ganaremos porque somos la mayoría.”
Dadas las numerosas manifestaciones, no faltaron los enfrentamientos. En Varsovia, por ejemplo, se produjeron algunos incidentes violentos por parte de grupos nacionalistas que desafiaron la marcha pro-Europa. Unas horas antes del inicio de las manifestaciones, la policía detuvo a 12 personas, algunas de las cuales resultaron ser miembros del grupo italiano Forza Nuova.
¿Cuál es la posición del Tribunal Supremo polaco tras las manifestaciones? Sigue defendiendo su sistema judicial. La presidenta del Tribunal Supremo, Małgorzata Manowska, considera que la legislación europea «no puede socavar los principios constitucionales» de Polonia y que la organización del poder judicial es una competencia nacional.
Por lo tanto, hay muchos temores entre los que apoyan la permanencia de Polonia en la Unión Europea. Por ejemplo, ha crecido el temor a que la confrontación con las instituciones europeas pueda conducir a la ‘Polexit‘. Sin embargo, aunque el gobierno polaco sigue afirmando la primacía de la legislación nacional, también dice que no tiene intención de abandonar la Unión Europea.