No más «ideología de género», «religión climática» o «multiculturalismo». La «Agenda de España«, presentada ayer por el partido de extrema derecha Vox durante su congreso en Madrid, va en una dirección completamente diferente. Hacia el fortalecimiento del Estado, por ejemplo, en prácticamente todos los ámbitos.

La Agenda de Vox, ilustrada por el presidente del partido, Santiago Abascal, es una respuesta a la Agenda 2030 del Gobierno español de Pedro Sánchez. Articulada en veinte puntos, explicados en la web de Rtve, que recogen en parte el programa electoral de Vox para 2018, la Agenda propone, en primer lugar, un importante refuerzo del Estado central.

En los ámbitos de la educación, la sanidad, la justicia y la seguridad, Vox reclama la centralización de competencias. También exige el fin de la autonomía local y la prohibición de partidos, asociaciones y ONG «que persiguen la destrucción de la unidad territorial de la nación y su soberanía».

Además, la Agenda de España propone la derogación de las leyes sobre violencia de género. Estas, según Abascal, deberían ser sustituidas por una ley contra la violencia intrafamiliar, dirigida por igual a hombres y mujeres. De este modo, Vox rechaza lo que considera una «ideología de género«, negándose a reconocer la especificidad de la violencia contra las mujeres.

En cuanto a la lucha contra el cambio climático, Vox pretende oponerse a un «ecologismo radical» que perjudique los intereses de los españoles.

En materia de inmigración,por otro lado, el partido de Abascal pide la expulsión inmediata de todos los inmigrantes ilegales y el paso a una «inmigración controlada», gestionada en función de las necesidades del mercado laboral español.