Con el objetivo de proteger a los animales y mantener el mejor equilibrio natural posible en el océano, la organización sin fines de lucro OCEARCH, ha venido poniendo en práctica una tecnología que les permite mantenerse informados sobre la actividad animal en el mar y así ayudar a su conservación.

Desde hace algunos años OCEARCH  captura tiburones para evaluar su estado de salud, recoger pruebas de su tejido y sangre para posteriormente implantarles un chip de rastreo. Aunque puede ser algo incómodo, no es de mayor gravedad para los tiburones que suelen sufrir muchas lesiones durante su vida. «Muchos tiburones que encontramos tienen aletas deformadas y cicatrices corporales que indican heridas graves de otros animales en la naturaleza», asegura un vocero de la organización.

Alrededor de la península ibérica hay dos ejemplares. Machaca, un tiburón azul que se pasea por las costas de Vigo, España, aunque el geolocalizador se le fue colocado en Massachusetts, Estados Unidos. Mide 2 metros y medio. Por otro lado, Rizzilient un ejemplar hembra de metro y medio. Suele ubicarse cerca de la Vila do Conde, en Portugal, aunque fue etiquetada en Nueva York, Estados Unidos.

A través de la aplicación móvil de OCEARCH disponible tanto para Android, como IOS, puede verse la ubicación de estas dos criaturas y de muchas más. También pueden observarse los movimientos de otros animales del mar.