Un hombre ruso entró por error a formar parte de un reality show en China. En principio iba solamente a ofrecer sus servicios como traductor, pues maneja a la perfección los idiomas ingles y mandarían. Sin embargo, los productores del programa se vieron deslumbrados por su físico y le hicieron una pregunta que seguramente no podrá olvidar: «¿le gustaría probar una nueva vida?”.
Sin darse cuenta Vladislav, quien trabajaba también como modelo ocasionalmente, se vio convertido en un participante de Produce Camp 2021, un reality que consiste en someter a los concursantes a pruebas de baile y canto para así escoger los miembros de la nueva boy band internacional de éxito. El joven de 27 años y sus compañeros fueron trasladados a una isla artificial frente a la costa de Hainan, donde le son retirados sus móviles y toda comunicación con el exterior.
El reality que dura tres meses se convirtió en una autentica tortura para el ruso, quien a pesar de no esforzarse en sus presentaciones logró clasificar entre los 25 chicos semifinalistas del programa. En la final no tuvo otra opción que rogarle al público que no votaran por él, para así poder escapar de su encierro.
«Espero que los jueces no me apoyen. Mientras que los demás quieren obtener una A, yo quiero obtener una F, ya que significa libertad», dijo a un medio de comunicación chino. Finalmente el sábado fue eliminado del concurso y sus deseos se hicieron realidad.