El Barça sigue manteniendo el pulso al Atlético de Madrid en la lucha por la Liga tras imponerse a un buen Betis por 3-1 en el Camp Nou. Los azulgranas, sin embargo, dejaron muchas dudas de cara a su duelo a vida o muerte con el Atlético de Madrid el próximo miércoles en la Liga de Campeones.
Y es que el Barcelona parece que aún no ha aprendido la lección de derrotas como las que sufrió contra el Valencia en el Camp Nou o el Valladolid en el José Zorrilla. Sólo así se puede comprender la apatía que mostraron los culés durante la mayor parte del encuentro y que les pudo costar muy caro.
Leo Messi logró abrir el marcador tras transformar en el minuto 14 un penalti cometido por Jordi Figueras a Alexis Sánchez. Todo hacía indicar un paseo militar para el Barça, pero la desgana se apoderó de los catalanes y crearon muy pocas ocasiones de gol para hacer el 2-0.
El Betis se dio cuenta de que la actitud de su rival le abría una puerta para puntuar en el Camp Nou y comenzó a creer en el empate. Especialmente en la segunda parte, donde cada balón colgado por los verdiblancos ponía un nudo en la garganta al Barça. Sin embargo, cuando mejor estaban los sevillanos llegó el 2-0.
Figueras marcó en propia puerta en el 65 cuando trataba de despejar un centro que iba hacia Pedro. Ya sabe que esta temporada en el Betis la mala suerte es fiel compañera de camino de los andaluces y el Camp Nou no fue una excepción. Con el 2-0 el partido parecía sentenciado….nada más lejos de la realidad.
Y es que Rubén Castro, que salió al campo en el segundo tiempo tras ser de manera sorprendente suplente, le dio emoción al marcador dos minutos después. El canario recortó con una finta a Adriano, Mascherano e Iniesta -a los que dejó literalmente tumbados- y con un disparo cruzado batió a Pinto.
Volvieron los nervios al Camp Nou y la sensación de que el Betis podía empatar el encuentro en cualquier jugada. Sin embargo, cuando el fantasma de Rafael Sobis en 2007 comenzaba a merodear el coliseo azulgrana apareció Neymar, de nuevo, para sentenciar el partido.
El brasileño, que había sido suplente, en una de sus internadas por la banda izquierda centró y su asistencia fue cortada con la mano por Antonio Amaya. Prieto Iglesias decretó penalti y Messi batió a Adán tras recoger el rechazo dejado por el portero tras detener la pena máxima ejecutada por el argentino.
El marcador ya no se movió más y el Barça se mantiene segundo en la Liga aunque deja muchas dudas de cara a su partido del próximo miércoles en Champions en el Vicente Calderón. Como juegue con la misma actitud que contra el Betis pocas opciones tendrá de alcanzar las semifinales.