El Parlamento Europeo aprobó de manera definitiva la legislación que prohíbe a las compañías de teléfonos tener un cargador único y no intercambiable.
Esto se traduce en que los usuarios tendrán finalmente la posibilidad de compartir un mismo cargador para todos sus teléfonos móviles independientemente de la marca del dispositivo.
Hasta finales del 2024, en la Unión Europea, todos los teléfonos celulares, tablets y cámaras serán dotados de un mismo tipo de puerto de recarga (USB-C).
Este puerto es el mismo que usan dispositivos como el Nintendo Switch, la MacBook Pro, y algunos de los modelos del Samsung Galaxy.
Esta ley forma parte de la iniciativa de reducir los residuos electrónicos y permitirles a los consumidores de tomar decisiones más sostenibles. Al haber diferentes tipos de cargadores no solo se producen más de ellos de manera independiente – contribuyendo a la sobreproducción y segmentación del trabajo – sino que también se produce mucho más residuos pues al adquirir otro dispositivos, por lo general, los cables son los primeros en ser desechados por no poder ser reutilizados.
Con esta idea en mente, y debido al incremento de la necesidad de computadoras portátiles y baterías, la legislación ha demostrado ser más ambiciosa proponiendo que a partir de la primavera del 2026 esta obligación se extienda también a las computadoras portátiles o laptops.
El texto legislativo fue aprobado con 602 votos a favor y solo 13 encontrar, con 8 siendo abstenciones.
Ahora solo queda esperar que los resultados sean los deseados. Sería también valioso preguntarnos si un cambio en solo la Union Europea sera suficiente para contrarrestar los efectos de la polución en el ambiente. Recordemos que los países que más dispositivos utilizan no son los europeos (por una cuestión numérica) sino India, Brasil, Rusia y lógicamente también Estados Unidos.
Porque el vender nuevos y diferentes cargadores resulta rentable, es difícil creer que las empresas lo dejen ir así nomas.