La Policía Metropolitana de Londres es conocida como Scotland Yard, y hoy ocupa titulares después de que su comisaria jefa haya presentado su dimisión. Cressida Dick deja el cuerpo por los casos de racismo, sexismo y homofobia entre sus trabajadores.

En los últimos días se han dado a conocer varios de estos casos, lo que ha llevado a Cressida Dick a reunirse con el alcalde de Londres. Tras la reunión, la comisaria jefe ha publicado un comunicado en el que asegura que ya no cuenta con la “confianza” del alcalde, Sadiq Khan.

“No me ha dejado otra elección más que dar un paso a un lado”, afirma. Por el momento continuará en el puesto para asegurar la estabilidad del cuerpo, hasta que se elija a un nuevo comisario.

Las presiones para cambiar la estructura interna de Scotland Yard eran notables. El propio alcalde ha asegurado que “la única manera de comenzar a hacer frente a la escala de los cambios que son necesarios es tener un nuevo liderazgo”.

El pasado 1 de febrero, una investigación de la Oficina Independiente para la Conducta de la Policía destapó “vergonzosos” mensajes de WhatsApp entre 14 agentes de Scotland Yard. La investigación revela diversos casos de acoso sexual y laboral, misógina y discriminación entre 2016 y 2018.

La mayoría de los implicados ya ha dejado el cargo, aunque nueve siguen ejerciendo sus funciones. Cressida Dick ha pedido disculpas en varias ocasiones, pero no ha sido suficiente para mantener su puesto.

La polémica ha trascendido, ya que Dick es la primera mujer en dirigir el cuerpo, y también la primera en expresar abiertamente que es homosexual. Ahora se despide del que dice ha sido “el mayor honor y privilegio de mi vida”.