Los miembros de la comunidad LGBT+ sufren una grave discriminación en Africa. Muchos países tienen leyes contra las personas no binarias u homosexuales. Según un informe de Reuters, el parlamento ghanés está planeando empeorar la situación de la comunidad LGBT+ en Ghana con una nueva ley.

La situación actual de los miembros de la comunidad LGBT+ en Ghana

Como en muchos países africanos, los miembros de la comunidad LGBT+ en Ghana se enfrentan a una grave discriminación. La homofobia está omnipresente en el país de África Occidental. Los transexuales y los homosexuales son estigmatizados, chantajeados, a menudo maltratados físicamente y condenados al ostracismo por sus familias y amigos.

También, Ghana es uno de los más de 30 países africanos en los que las relaciones entre personas del mismo sexo están prohibidas, con penas de hasta tres años de cárcel. A pesar de ello, la comunidad LGBT+ ha conseguido construir su propio espacio, más o menos seguro. Una nueva ley amenaza ahora con destruirla.

¿Qué contiene la nueva ley?

Hasta ahora, la reasignación de género no es ilegal en Ghana, pero la nueva ley pretende llevarla a la ilegalidad. La normativa anti-LGBT+, ya de por sí muy estricta, se va a endurecer aún más.

Prevé penas de prisión de hasta 10 años para las personas que defiendan los problemas de este colectivo. Entre tres y cinco años esperan a las personas que salen del armario o se someten a una cirugía de reasignación de género. La ley también contiene disposiciones que obligarían a algunas personas a someterse a una terapia de conversión.

El proyecto de ley procede de un grupo de legisladores de la oposición de Ghana. Los partidarios la defienden con el argumento de la protección de la familia, muy valorada en el país multiétnico. El valor de la familia se pondría en riesgo por los miembros de la comunidad LGBT+.

Quienes se oponen a la ley la consideran un serio revés para un país cuya reputación de democracia amistosa y estable ha atraído hasta ahora a muchos turistas e inversores.

Amnistía Internacional también se opuso al proyecto de ley, afirmando que violaría la ley antitortura de Ghana.

El proyecto de ley aún no se ha votado, pero cuenta con un amplio apoyo de los legisladores. En la presentación del proyecto de ley, el presidente ghanés Nana Akufo-Addo pidió un debate civilizado sobre el mismo, pero no comentó su contenido.