Las disposiciones del régimen talibán

Las mujeres afganas bajo el régimen talibán están sometidas a nuevas normas, que afectan principalmente al sistema educativo.

El Ministro de Educación, Abdul Baqi Haqqani, explica en qué consisten las nuevas directrices del gobierno. En primer lugar, habrá una clara división entre hombres y mujeres en las universidades, luego se introducirá un nuevo código de vestimenta y se revisarán las materias impartidas. También se adoptará la división por clases en las escuelas primarias y secundarias. Las mujeres deberán llevar el hijab – velo islámico – pero el Sr. Haqqani no especificó si será obligatorio cubrirse la cara.

El gobierno señala que no se prohibirá a las mujeres el acceso a la educación. También subraya que les han prohibido temporalmente acudir a sus lugares de trabajo – excepto a los del sector sanitario – por razones de seguridad.

Es desconcertante que las clases exclusivamente femeninas sólo atenderán profesoras, y si hay escasez de profesoras, se corre el riesgo de que las mujeres afganas queden excluidas de la educación. A este respecto, el ministro dice: «También podemos utilizar a los profesores varones para enseñar desde detrás de una cortina, o utilizar la tecnología«.

El ministro explica que la intención del Gobierno es «crear un plan de estudios sensato e islámico que esté en consonancia con nuestros valores islámicos, nacionales e históricos y, por otro lado, poder competir con otros países«.

Entre los acontecimientos relacionados con este tema, es muy llamativa la manifestación de cientos de mujeres afganas que apoyan al nuevo gobierno. Ellas se desmarcan del pensamiento de otras mujeres que luchan por la protección de sus derechos.

Desde que los talibanes abandonaron el poder en 2001, se han realizado enormes progresos. Por ejemplo, en la mejora de las tasas de escolarización y alfabetización en Afganistán. Por lo tanto, la política marca un cambio significativo con respecto al periodo anterior a la toma del poder por los talibanes.