«Estamos al comienzo de una emergencia climática y ecológica», avisa la activista Greta Thunberg, tras la ola de incendios, inundaciones y sequía a la que se enfrenta el mundo entero. Las altas temperaturas comienzan a incomodar y generar temor en la población mundial, que empieza a entender sobre el cambio climático del que se lleva hablando años.
En el Reino Unido, las jornadas de calor han calentado el pavimento y deformado las vías de los trenes. Para el próximo fin de semana, incluso Irlanda del Norte podría seguir rompiendo su récord y llegar a los 33 grados centígrados, aunque la lluvia también asoma su presencia.
Las inundaciones de Alemania y Bélgica mataron al menos a 200 personas, otras 100 continúan desaparecidas. En Nueva Zelanda la lluvia y las tormentas también les han obligado a declararse en estado de emergencia. En India, 35 personas murieron tras los deslizamientos de tierra en Mumbai.
En Siberia el calor ha originado incendios forestales que han llevado el humo espeso hasta la ciudad. Las autoridades locales pidieron a los residentes que permanecieran en sus casas para evitar asfixiarse con los humos. Se cree que esta situación podría catalogarse como uno de los peores eventos de contaminación del mundo. ¿Estará el planeta a borde de una emergencia global?