El principal acceso peatonal que une las Casas Colgadas de Cuenca con el Puente de San Pablo se ha derrumbado esta mañana. Por suerte, la calle Canónigos se encontraba en obras y, según las autoridades, no hay que lamentar daños personales.
La llamada de aviso se produjo a las 10.36 horas de la mañana. En la misma se alertaba de que se había derrumbado parte del muro que sostiene la calle Canónigos. Con el desprendimiento se han arrastrado rocas y tejas que han caído hasta la ribera del río Huécar y a la pequeña carretera que sube desde el cruce del Auditorio.
La zona se encontraba en obras desde el pasado 26 de abril. El ayuntamiento había destinado fondos a la reparación del muro de mampostería sobre el que se asienta la calle. Este presentaba daños producidos por unas fugas de la red de saneamiento.
Desde que se detectaron las primeras grietas en la primavera de 2019, el ayuntamiento decidió cortar la calle. Las autoridades han confirmado que no se han producido daños personales. Los cuatro operarios que estaban trabajando en las obras se encontraban descansando en ese preciso momento.
Las Casas Colgadas son el edificio más emblemático de Cuenca y, junto con el Puente de San Pablo, dos de las atracciones turísticas más visitadas de la ciudad. Cuenca es Ciudad Patrimonio de la Humanidad y cada año su casco antiguo recibe miles de visitas.