El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha ordenado un ataque aéreo esta madrugada en el este de Siria. Un bombardeo que, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, ha acabado con la vida de 22 supuestos milicianos.

El Pentágono ha indicado a través de un comunicado que “bajo instrucciones del presidente Joe Biden, las fuerzas militares de Estados Unidos realizaron esta noche ataques aéreos contra la infraestructura utilizada por grupos militantes respaldados por Irán en el este de Siria.

El ataque tenía como objetivo las infraestructuras de las Fuerzas de Movilización Popular, una coalición de milicias progubernamentales iraquíes, y la milicia iraquí Kataib Hezbolá. Desde Estados Unidos pretendían destruir varios almacenes de armas que habrían entrado a Siria a través de la frontera con Irak.

El Observatorio Sirio, con sede en Londres, ha asegurado que el ataque habría destruido también tres camines cargados con munición. Tras el bombardeo se habrían iniciado procedimientos para evacuar otro edificios de la zona y trasladar la sede. No se descarta que el número de víctimas aumente, ya que se han notificado varios heridos de gravedad.

Desde Washington han argumentado que el bombardeo es la respuesta a recientes ataques contra tropas estadounidenses en la zona. En el comunicado emitido, el portavoz del Pentágono, John Kirby, asegura que “esta operación lanza un mensaje inequívoco: el presidente Biden actuará para proteger al personal estadounidense”.

Las reacciones no han tardado en llegar. La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, ha destacado que desde Moscú “condenan enérgicamente” los actos. “Confirmamos nuestra oposición a cualquier intento de convertir el territorio sirio en un campo para ajustar cuentas geopolíticas”, ha manifestado según la agencia rusa de noticias Sputnik.

La relación entre Estados Unidos e Irán se ha visto alterada después de conocerte una posible negociación de vuelta al pacto nuclear. Bajo el gobierno de Donald Trump, Estados Unidos abandonó unilateralmente este plan en 2018.