El artista, músico, pintor y actor Franco Battiato, murió a sus 76 años en su casa en Milo, Sicilia tras sufrir una larga enfermedad de la que su familia no quiso revelar ningún detalle. El músico llevó su sonido desde Italia al resto del mundo, pasando por el pop, el rock y el romanticismo en estado puro. Su carrera se inició en 1981 con su primer disco «La voce del padrone», de 30 discos de estudio en toda su trayectoria.
Del primer álbum hubo una versión en español «La voz de su amo» que se convirtió en un éxito mundial. Su disco «Ecos de danzas sufi» hecho en 1985 logró figurar como disco de oro en España. En sus ratos libres, Battiato disfrutaba leer pensamientos de San Juan de la Cruz y Santa Teresa.
En 1985 fundó su propia editorial «L’Ottava», con la que se publicaron 14 libros. En 1987 empezó a componer óperas líricas como Génesis y Gilgamesh. En 1990 comenzó su incursión en la pintura y realizó varias exposiciones de su arte alrededor del mundo. También trabajó como actor y director de proyectos audiovisuales. En 2017 tuvo su último concierto en Catania, la ciudad que lo acompañó en sus inicios, hasta que en 2019 se formalizó su retiro de la música.
«Nos dejó un Maestro. Uno de los más grandes compositores italianos. Único, inimitable siempre buscando nuevas expresiones artísticas. Deja un legado perenne», dijo Dario Franceschini, ministro de la cultura en Italia.