La antorcha ha arrancado hoy en la prefectura de Fukushima (noreste de Japón), la llevan la selección nipona femenina de fútbol, campeonas del mundial en 2011.
Este acto ha empezado con las medidas del coronavirus. Ha empezado desde las instalaciones de entrenamiento J-Village. En el pasado sirvieron de base logística para la crisis nuclear de Fukushima de 2011.
La futbolista nipona Azusa Iwashimizu, específicamente, ha sido la encargada de encender la llama de la antorcha a partir de la que ya se encontraba desde hace un año en Japón.
La antorcha durante 121 días viajará por las manos de unos 10.000 corredores que recorrerán las 47 prefecturas del país, y que terminará con el encendido del pebetero en el Estadio Olímpico de Tokio el próximo 23 de julio.
Hashimoto, la presidenta del comité de organización de los Juegos Olímpicos de Tokio, confía en que esta antorcha «pueda llegar a la inauguración de los Juegos llena de esperanza para todos en Japón y en el mundo, y brille en la oscuridad e ilumine el camino», expresó la exatleta olímpica.
El acto ha sido en presencia de 160 representes deportivos y políticos, sin público. La organización ha pedido a los ciudadanos que no existan multitudes de personas en el paso del relevo, y que en vez de animar con la voz, aplaudan. Advirtió que se podría cancelar el relevo en ciertos lugares, si se observa multitud en ellos.
Los corredores mantendrán distancia y llevarán mascarilla en caso de que es acercamiento sea necesario.