Luego de ocho días de ser contratado, un hombre de 36 años, robó 12.000 kilos de chocolate valorados en 250.000 euros y los vendió por 1.200 euros. Su trabajo era recoger la carga en Alemania y llevarla hasta el Parque Empresarial Elche, en Alicante, pero nunca llegó a su destino.
El presunto ladrón, con antecedentes penales, fue pidiendo dinero a la empresa durante el viaje, argumentando que necesitaba cubrir los gatos de gasolina y mantenimiento del vehículo en la carretera. Pudo sacarles hasta 1.000 euros.
El camión de carga en el que trasladó la mercancía fue encontrado cerca de la localidad de Cox. Estaba vacío y con las llaves puestas. Según las autoridades el vehículo estaba valorado en más de 70.000 euros, reseñó 20minutos.es.
La Policía Nacional revisó el trayecto de la mercancía a través del Sistema de Posicionamiento Global y se percató de que el camión estuvo detenido casi dos horas en un polígono de Alicante. Revisando cada una de las naves, lograron encontrar los kilos de chocolate robados. El dueño del lugar fue acusado de receptación, que consiste en ocultar conscientemente un delito.