Los presidentes latinoamericanos Macri, Piñera, Santos, Temer y Peña Nieto ratificaron su compromiso para «restaurar la democracia en Venezuela», como es el anhelo de muchos, así lo manifestaron durante la VII Cumbre de las Américas celebrada en Perú y a la que no asistió el presidente de Venezuela Nicolás Maduro.
Michel Temer, presidente de Brasil, pidió durante su intervención, buscar una salida democrática a la crisis política que a traviesa el país petrolero, con el respaldo del Grupo de Lima y de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
«La democracia es uno de los pilares de nuestra integración. La OEA puede utilizar los instrumentos de protección de los derechos humanos en Venezuela y reencontrar una salida democrática a la crisis política y humanitaria en ese país», expresó.
En su alocución, el presidente argentino Mauricio Macri, manifestó que su Gobierno desconocerá cualquier elección que surja de la convocatoria hecha por el Gobierno de Venezuela, pues a su juicio no es una elección democrática.
Entretanto el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, fue enfático en decir que su Gobierno será «implacable con el régimen opresor de Nicolás Maduro», al tiempo que no dudó en decir que seguirá prestando ayuda al pueblo venezolano que «muere de hambre».
Sebastián Piñera, primer mandatario de Chile, solicitó a Venezuela que se reencuentre con el camino de la democracia y pidió que el Gobierno reconozca la crisis humanitaria que atraviesa el país. «Es una situación que está condenando al hambre y la muerte a los venezolanos», dijo.
Enrique Peña Nieto, presidente de México, no se hizo esperar en su respuesta a la situación de Venezuela, tema principal de la Cumbre, manifestando que desde país espera que sean los propios venezolanos quienes puedan «resolver de manera pacífica» la crisis que atraviesa el país.
«Esperamos que sea posible para los propios venezolanos resolver la crisis de manera pacífica, por medio del restablecimiento de la democracia», exclamó.