La red social Twitter anunció ayer jueves que suspendió más de un millón de cuentas que hacían «apología del terrorismo» desde el 2015, además que sus esfuerzos han comenzado a hacer de la plataforma, lamentablemente, «un lugar indeseable» para llamar a la violencia,cuando realmente ese no es su objetivo.
Ya para julio y diciembre del año pasado, Twitter había cerrado 274.460 cuentas «por violaciones relacionadas con la apología del terrorismo».
Sin embargo esa cifra bajó un 8,4% con relación al período del informe anterior y es la segunda disminución consecutiva, según lo expresado en el comunicado que emitió la red social.
«Seguimos viendo el impacto positivo y significativo de años de trabajo arduo para hacer de nuestro sitio un lugar indeseable para quienes buscan hacer apología del terrorismo, lo que hace que este tipo de actividad se aleje cada vez más de Twitter», agregó el comunicado.
Debido a esas razones y para evitar inconvenientes in otros usuarios, la plataforma ha tenido que hacerle frente al desafío de responder a la presión de gobiernos para que tomen medidas contra yihadistas y otras personas que solamente usan sus cuentas para provocar a la violencia, al tiempo que mantiene el respeto a la libertad de expresión.
De las cuentas suspendidas, el 93% fueron identificadas gracias a herramientas internas, eso en relación al 0,2% que fueron atendidas a solicitudes de gobiernos. Además, 74% fueron eliminadas antes de su primer tuit, reza el comunicado.
«Con la aprobación de nuevas legislaciones y las discusiones actuales sobre las regulaciones que están teniendo lugar en el mundo sobre el futuro del discurso público en línea, vemos un efecto potencialmente disuasivo sobre la libertad de expresión», expresa.
«Los gobiernos de todo el mundo buscan cada vez más restringir la palabra en línea obligando a las redes sociales a actuar como censores», citaron un estudio de Human Rights Watch.