Una mujer cautelosa vale por dos, aunque esto ya no se trata de guardar tus fotos más sensuales en la nube. Seas o no famosa, todas estan sujetas al tipo de hack y filtraciones que sufrió Jennifer Lawrence en noviembre del año pasado. Así que tal vez lo ideal sea tener ese material en una carpeta en tu computadora o en un disco duro externo. Pues bien, ¿qué debes hacer cuando lo quieres compartir? Seguro ya has enviado nudes por WhatsApp, pero nunca sabes qué hará la persona luego que lleguen a sus manos. Puede que te salga alguien sincero o en el peor de los casos, una muy mala persona que podría compartirlas sin tu consentimiento.
Por esto vale la pena que utilices una sexting app que minimice los temores o riesgos.
Confide. Utiliza la protección de mensajes a nivel militar (precisamente esa característica la que atrajo al equipo de la Casa Blanca de los Estados Unidos en cuanto Donald Trump asumió la presidencia). Te da acceso al envío de mensajes cifrados, los cuales se autodestruirán después de ser leídos. Con las imágenes pasa de igual forma, con el beneficio de que la persona en recibirlas no podrá archivarlas ni aplicar el screenshot. ¿La mala? La cantidad de fotos que puedes enviar es limitada al mes, en caso de querer más, vas a tener que pagar, así que no te emociones.
Kaboom. Es la que te hace falta, pues no solo se sincronizará con WhatsApp sino con tus redes sociales. Por cada mensaje hecho dentro de la app se produce una única dirección web resguardada, luego deberás asignarle el “tiempo de vida” y al final seleccionar a quién se lo vas a mandar para copiarle ese link en la plataforma que desees o hasta vía SMS. ¿El contra en este caso? No es a prueba de screenshots. Así que lo mejor es que el mensaje dure menos de lo que tome apretar los respectivos botones.
Aunque cualquiera de las apps pueda tener fallas que representan cierto riesgo, la protección que brinda es mejor que nada, ¿no te parece? Medítalo, es como manejar un coche con mejores frenos. No te niegues de tu derecho a disfrutar tu sexualidad; enviar nudes o sextear de manera más responsable, sin comprometerte o exponerte puede ser posible.