En menos de dos semanas, ocurren cuatro ataques con explosivos en Texas. La Policía de Austin, creen que pueda tratarse de un atacante serial. Las primeras tres explosiones fueron paquetes dejados en las puertas de las casas, no fueron entregadas de manera convencional.
Tras una trampa explosiva que colocaron en la ciudad, dos hombres, resultaron heridos en horas de la noche del domingo. Las autoridades de Texas consideran que estas explosiones están relacionadas con las tres anteriores, sin embargo aún no manejan una teoría oficial sobre los hechos.
«Es posible que el dispositivo haya sido activado por alguien que estaba manipulando el cable que lo activó, lo pateó o entró en contacto con él”, dijo el jefe de policía de Austin, Texas, Brian Manley.
Manley manifestó durante una rueda de prensa que los dispositivos utilizados la noche del domingo son similares a las explosiones anteriores, por lo que aconsejan a los ciudadanos a tener más precauciones al visualizar paquetes extraños, dejados de forma no convencional e informar inmediatamente a las autoridades.
La policía y el FBI se trasladaron hasta la escena donde se produjo la última explosión. Aunque no se ha podido demostrar si las explosiones están conectadas, estas se produjeron en un período no mayor a 10 días.
Es de recordar que en las anteriores explosiones falleció un hombre y una adolescente y dos más resultaron heridas. Las víctimas eran personas negras e hispanas, por lo que se presume, a juicio de las autoridades, que sea por crímenes de odio racial.