El conjunto dirigido por José Mourinho asaltó Liverpool venciendo por 0-2 con medio equipo de suplentes y vuelve a la pelea por el campeonato.
Mucho se había hablado de este encuentro. El técnico portugués del Chelsea se había quejado amargamente durante toda la semana por tener que rendir visita a Anfield el domingo con la vuelta de las semifinales ante el Atlético el próximo miércoles. Con 5 puntos abajo en el campeonato, Mourinho advirtió de que pondría el equipo ‘B’ en señal inequívoca de que daba la liga por perdida. Sin embargo, y cosas del fútbol, cuando todo parecía de cara para los Reds, los tres puntos se marcharon a Stamford Bridge. Con un Chelsea muy bien colocado y ordenado, y un Liverpool algo espeso en ataque, los bleus se aprovecharon en el descuento de la primera parte de un error garrafal del capitán Gerrard. El balón le cayó a Demba Ba que batió perfectamente la salida del guardameta. La segunda parte fue un acoso de los locales pero sin grandes ocasiones de batir al veterano guardameta Schwarzer, que hizo olvidar por completo la ausencia de Peter Cech. Así, otra vez en el descuento y en otra contra, Torres y William se plantaron solos ante el guardameta del Liverpool que poco pudo hacer. El español se la cedió al brasileño para que la empujara sentenciando el partido y apretando la Premier con un Mou que lo celebraba como un ‘loco’ en la banda.
Esta victoria del Chelsea, unida horas más tarde a la del Manchester City por 0-2 al Crystal Palace con goles de Dzeko y Touré, deja la Premier a falta de dos jornadas para la conclusión, con el Liverpool líder con 80 puntos, el Chelsea 2º con 78 y el Manchester City 3º con 77 y un partido menos, el que tiene que jugar ante el Aston Villa en casa. Parece que las últimas jornadas habrá que mirar a las islas porque será el único campeonato con emoción hasta el final.