Los españoles han cambiado sus hábitos de consumo debido a la crisis. Por causa de la mala situación económica los consumidores ahorran más en ocio, gas, luz, ropa, telefonía y alimentación. Más del 70% compran sólo lo básico. Así lo revela el estudio Nielsen 360º, que analiza el mercado de consumo de forma anual.
El ocio ha sido uno de los primeros ámbitos que se ha notado la crisis, y a dado lugar al cierre de unos 6.500 establecimientos dedicados a este (bares, discotecas y restaurantes).
Alfonso Delgado, responsable de nuevos mercados de la compañía Nielsen, asegura que esto también está relacionado con el ahorro en la ropa, al salir menos la gente no tiene la necesidad de renovar el vestuario.
En cuanto a la alimentación, el estudio Nielsen revela que la mayoría de consumidores se fija en los descuentos y las promociones y buscan las marcas más económicas. Además intentan comprar sólo lo básico y «dicen ser conscientes del precio» de los alimentos, en el sentido de que lo conocen y lo tienen relativamente controlado, sabiendo cuándo este se altera y qué es más caro y más barato antes de ir a comprarlo.
Las ventas en alimentación envasada, con un crecimiento del 1,4%, han sido las únicas que han presentado un comportamiento más dinámico, según el informe.
Desde Nielsen declaran que la la mala situación del mercado se debe a la crisis, al alto nivel de desempleo.