Las tropas ucranianas enviadas al este del país para reconquistar las zonas ocupadas por la milicia filorusa han sido interceptadas en la madrugada del 16 de abril, hoy, en el centro de Kamatorsk.
El aeropuerto de la ciudad había vuelto a ser controlado por Kiev el 15 de abril, después de la puesta en marcha de la operación antiterrorista anunciada por el presidente actual, Oleksandr Turčinov. Los tanques han conseguido entrar en Sloviansk, otra ciudad importante de la región minera. Mientras que esta mañana, los manifestantes filorusos han tomado el ayuntamiento de Donestk.
Mientras la tensión sigue aumentando, el presidente ruso Vladimir Putin ha hablado por telefono con la canciller alelmana Angela Merker sosteniendo que Ucrania “está al borde de la guerra civil” y ha dejado entender que la estabilidad del país condicione la distribución de gas a Europa.
Los dos leader habrían confirmado el encuentro a cuatro para el 17 de abril en Ginebra entre Rusia, la Unión Europa, Estados Unidos y Ucrania. Sin embargo,
Desde el Klemblin se condena la operación militar llevada a cabo en el Oriente ucraniano como un “uso anticonstitucional de las fuerzas contra una protesta pacifica”. Mientras que Turčinov, presidente ucraniano, ha dicho que el objetivo de tal operación es la protección de los ciudadanos ucranianos, el bloqueo del terrorismo y actor criminales, además de impedir la división del país.
Desde el otro lado del Oceano, el gobierno de los Estados Unidos han declarado que están pensando en aumentar las sanciones infligidas a Rusia.